Desde TodoAlfalfa estamos convencidos del potencial del cultivo, noble por dónde se lo mire, por esa razón, proponemos incrementar el marketing y la comunicación de sus bondades, ya que el cultivo, que brinda un amplio abanico de posibilidades, pueda crecer, se desarrolle, gane espacios de debate y produzca mejores resultados en la industrialización y exportación de sus productos.
Todos los actores consultados por nuestro medio: productores, semilleros, técnicos, empresarios destacan el potencial argentino para convertirnos en productores claves de Alfalfa. Sin embargo, la falta de previsibilidad, de políticas que acompañen al sector y un cúmulo de puntos más, atentan contra ello.
En sus mejores momentos, el país superó los 6 millones de hectáreas sembradas, sin embargo, en la actualidad no llegamos a los 3 millones. El objetivo es ponerle “la corona a la reina”, como sostiene Daniel Basigalup, y mejorar el marketing, mejorar la calidad del cultivo, ampliar el área de siembra, incentivar la industrialización e incrementar las exportaciones.
Para que todo ello suceda es necesario que gobiernos, cámaras, clúster, empresarios y productores discutan hacia dónde y cómo queremos ir, pero con un objetivo en el horizonte que debe ser el “faro” para crecer y ganar mercados.
Desde nuestro espacio, apostamos a comunicar, generar debates, reuniones y jornadas de capacitación, como con la organización de Expo Alfa 2024 con sus Jornadas Nacionales de Alfalfa, Exposición estática, Plots de semilleros, Ronda de negocios, Dinámicas de maquinarias y otros atractivos, para que todo lo anteriormente expresado pueda exponerse en un espacio para la cadena.
Además vamos a promover la investigación de otros usos y de sub productos de la alfalfa, junto a instituciones públicas y privadas, promoviendo, por ejemplo, el consumo en humanos de brotes de alfalfa deshidratados como snack
Consideramos a la alfalfa como un cultivo que aporta un sinnúmero de soluciones a problemas que se presentan a los productores. Esta forrajera aporta fibra efectiva y proteína en cada ración que el productor le brinda a sus animales, ya sea para la producción de carne o de leche. Pero no debemos dejar de tener en cuenta la necesidad que el mundo tiene de “fibra” para alimentar a sus animales. Eso, nos ubica como país un lugar de privilegio por extensiones y por calidad, para que la alfalfa tenga mejoras sistemáticas y de esa manera competir con España y Estados Unidos, principales exportadores del mundo.