España incrementó más de un 15 por ciento la exportación de forraje deshidratado 

Son datos de la Asociación Española de Fabricantes de Alfalfa Deshidratada (AEFA). Durante el 2024 se comercializaron más de 750 mil toneladas, un número que creció en comparación con 2023, pero que está lejos de la media de los últimos diez años.

El pasado año 2024 España comercializó en los mercados internacionales un total de 752.960 toneladas de forrajes deshidratados. De esta cantidad, cerca de medio millón correspondieron al formato de balas deshidratadas. A pesar de este aumento respecto a 2023, Luis Machín, director de AEFA, señala que «todavía estamos lejos de la media de los últimos 10 años, donde las ventas al mercado internacional se situaban por encima del millón de toneladas anualmente». 

Según los datos aportados por la Asociación Española de Fabricantes de Alfalfa Deshidratada (AEFA), el formato que más se exportó el pasado año fueron las balas deshidratadas con cerca de medio millón de toneladas vendidas en el mercado exterior, mientras que las ventas en formato granulado fueron de algo más de 250.000 toneladas. 

España continúa consolidándose como uno de los principales exportadores de forrajes deshidratados a nivel mundial.  

El año que culminó consolidó a Arabia Saudita como principal destino de las exportaciones españolas de forrajes deshidratados, con un volumen que superó las 163.554 toneladas. El segundo lugar lo ocupó Emiratos Árabes Unidos, con 126.311 toneladas, y China, tercero, que importó 102.137 toneladas. Estos tres países representan una parte significativa del total exportado, reflejando la fuerte demanda en estas regiones. 

Otros mercados importantes incluyen Corea del Sur, con 60.073 toneladas, y Jordania con 57.605 toneladas. En Europa, Portugal destacó como el mayor importador, con 41.954 toneladas, seguido de Francia y Grecia. 

Luis Machín, director de AEFA, hizo balance de las exportaciones de 2024: “Tras la drástica reducción de la demanda internacional en el pasado año 2023, las exportaciones se han recuperado ligeramente, pero todavía estamos lejos de la media de los últimos 10 años, donde las ventas al mercado internacional se situaban por encima del millón de toneladas anualmente”.  

Aunque de cara al futuro dese la asociación se muestran optimistas: “Se espera que en los próximos años la demanda global vaya en aumento, conforme se vayan recuperando los sectores lácteos y la cabaña ganadera en varios de los principales importadores mundiales de forrajes”.  

Por último, Luis Machín apuntó que “el sector está trabajando en mejorar la calidad y la eficiencia en la producción para mantener su posición competitiva en el mercado internacional”. 

Crecimiento y diversificación de mercados 

España continúa consolidándose como uno de los principales exportadores de forrajes deshidratados a nivel mundial. Este producto, esencial para la alimentación del ganado, ha encontrado un mercado creciente en diversos países, destacando especialmente en el continente asiático y en Oriente Medio. 

Las exportaciones españolas de forrajes deshidratados han mostrado un crecimiento notable en los últimos años, diversificándose hacia nuevos mercados. Además de los tradicionales compradores, países como Marruecos, Corea del Sur o Líbano han incrementado sus importaciones, lo que refleja la calidad y competitividad del producto español. 

Fuente: Interempresas