Durante el invierno del 2018 se encontraron altas densidades poblacionales del “pulgón azul” (Acyrthosiphon kondoi) en los cultivos de alfalfa de las cuencas lecheras de Santa Fe y Córdoba. En estas regiones el insecto tiene dos períodos de aparición principalmente, uno en el otoño y otro en la primavera y por lo general se presenta en forma conjunta con otras especies de pulgones que atacan a las alfalfas de grupo de reposo 9.
Desde el Instituto destacan que frecuentemente, las poblaciones del «pulgón azul» son las dominantes y superan los niveles de daño económico de 20-30 pulgones por tallo de más de 30 cm de altura. Una forma de atenuar el problema que causan estos insectos es el uso de cultivares de alfalfa con resistencia a los pulgones.
Según información provista por el INTA, las colonias de A. kondoi se ubican preferentemente sobre los brotes terminales de las plantas y, a diferencia del pulgón verde, no se desprenden con facilidad. Es una especie adaptada a las bajas temperaturas y es por esto que se la encuentra en el invierno, multiplicándose activamente por partenogénesis, desde mediados de julio hasta principios de primavera. En otoño, puede producirse otro pico poblacional. La toxina inyectada por este pulgón es más agresiva que la del pulgón verde y también transmite el virus del mosaico de la alfalfa (VMA). Las plantas dañadas por este pulgón presentan un marcado acortamiento de los entrenudos y un menor desarrollo de las hojas, que pueden deformarse o tornar a color amarillento o violáceo, para posteriormente secarse y caer, perdiendo calidad el forraje.
Cuando ocurren altas poblaciones de pulgones, y hay ausencia o baja densidad de controladores biológicos, una alternativa de control es la utilización de insecticidas selectivos para la fauna benéfica y amigables con el ambiente, adecuados a la estrategia fundamental del Manejo Integrado de Plagas (MIP) que consiste en la conservación de los enemigos naturales.
Frente a este contexto, se llevó a cabo un ensayo con la aplicación del insecticida Transform (propiedad de Corteva y en trámite para su utilización en alfalfa). Contiene 500 gramos del activo sulfoxaflor por kilogramo de producto. Está formulado como gránulos dispersables (WG) y ha sido clasificado dentro de la categoría toxicológica IV (productos banda verde, que normalmente no ofrecen peligro).
Resulta importante conocer la eficacia de control de nuevos insecticidas, comparados con los normalmente utilizados. Para ello se efectuó este estudio desde el INTA Rafaela y que fue publicado en su libro “Información Técnica sobre Producción Animal 2020”.
Con el objetivo de evaluar la respuesta a éste principio activo y el de otros insecticidas en el control del pulgón azul, se realizó un ensayo sobre un lote de alfalfa consociada (Alfalfa: 12 kg + Festuca: 6 kg + Trébol rojo: 6 kg) ya implantada (29 de abril de 2017) en la EEA Rafaela del INTA, sobre un suelo Argiudol típico serie Rafaela. La variedad de alfalfa utilizada fue Mecha (KWS). Se siguió un diseño experimental en bloques completamente aleatorizados con siete tratamientos y cuatro repeticiones. Las parcelas experimentales contaban con 10 m de largo por 4 m de ancho (40 m2). Los tratamientos consistieron en la aplicación de seis insecticidas y un testigo sin aplicación:
Los insecticidas se aplicaron el 23 de julio de 2018 cuando el número de pulgones por tallo estaba por encima del Umbral de Daño (20 pulgones por tallo; Aragón y Imwinkelried, 2007). Las aplicaciones se realizaron con mochila de presión constante (con una barra de 4picos y 2 metros de ancho de trabajo). El caudal aplicado fue de 100 litros por hectárea. La presión fue de 45 kg/cm2 (3 lib/pulg2). El tipo de pastilla utilizada fue cono hueco. Al momento de la aplicación las plantas estaban en estado vegetativo con unaaltura media de 20 cm. Las condiciones de humedad relativa, temperatura y velocidad del viento fueron de 35,7%, 12,4 °C y 16 km/h, respectivamente (Estación Meteorológica Automática de la EEA Rafaela).
En cada unidad experimental, el muestreo consistió en contabilizar el número de pulgones azules presentes en diez tallos de plantas de alfalfa antes de la aplicación de insecticidas y a las 24hs, 3, 7 y 14 días después de la aplicación (DDA). Además, se evaluó la producción de Materia Verde (kg/ha), Materia Seca (kg/ha) y relación hoja/tallo. El efecto de los tratamientos se evaluó mediante Análisis de la Varianza (ANAVA) y las diferencias significativas entre tratamientos con LSD Fisher.
Resultados y discusión
La aplicación de los insecticidas se realizó cuando el cultivo de alfalfa tenía una altura de 20 cm y la infestación de Acyrthosiphon kondoi (pulgón azul) era en promedio 254 pulgones por tallo, muy por encima del Umbral de Daño. El T2 tenía una población inicial menor al resto de los tratamientos pero sin diferencias estadísticas significativas (p=0,0611) (Tabla 1 -Gráfico 2).
Tabla 1.Númerode pulgones azul promedio en 10 tallos de plantas de alfalfa antes de realizar la aplicación para diferentes tratamientos.
Gráfico 2.N° de pulgones en 10 tallos antes de la aplicación de insecticida en los siete tratamientos.
A las 24 hs de la intervención química (Tabla 2 -Gráfico 3) se puede observar que el T7 (pirimicarb) y el T6 (clorpirifós) disminuyeron la población en un 73% y 64%, respectivamente y diferenciándose estadísticamente del resto de los tratamientos (P=0,0029).
Tabla 2.N° de pulgones promedio en 10 tallos para los diferentes tratamientos a las 24 hs de realizar la aplicación.
Gráfico 3.N° de pulgones en 10 tallos a las 24hs DA de insecticida en los siete tratamientos.
A los 3 DDA el T3 y T6 se diferenciaron estadísticamente (p<0,0001) del T4 y T1 (Tabla 3 –Gráfico 4). A los 7 DDA los tratamientos con insecticidas se diferencias estadísticamente del testigo sin control (p<0,05).
Tabla 3.N° promedio de pulgones en 10 tallos para los diferentes tratamientos a los 3 y 7 días después de realizar la aplicación (DDA).
Gráfico 4.N° de pulgones en 10 tallos a los 3 (amarillo) y 7 (verde) DDA de insecticida en los siete tratamientos.
A los 14 días DDA (Gráfico 5) todos los tratamientos se encontraron con la misma densidad poblacional de pulgones (Tabla 4). La disminución de la población de Acyrthosiphon kondoi en el tratamiento sin control podría ser explicada por una alta presencia de pulgones infestados por hongos Entomophthorales (controladores biológicos de insectos).Se hace necesario destacar que durante el ensayo no se detectaron ni parasitoides ni depredadores de pulgones.
Tabla 4.N° de pulgones en 10 tallos para los diferentes tratamientos a los 14 después de realizar la aplicación (DDA).
Gráfico 5.N° depulgones en 10 tallos a las 14 DDA de insecticida en los siete tratamientos. (Rafaela, 2018).
En cuanto al rendimiento, tanto en kg de Materia Verde (MV) y Materia Seca (MS), el testigo sin control (T1) se diferenció significativamente al resto de los tratamientos, siendo el de menor producción. El tratamiento que tuvo mayor producción fue el aplicado con sulfoxaflor 50%(T5) a una dosis de 50 g/ha. Tanto con el uso de clorpirifós (T6) comodepirimicarb(T7), se obtuvieron rendimientos similares y no se diferenciaron estadísticamente entre sí, pero sídel T1 yT5. En lo que respecta a la relación hoja/tallo, no se observaron diferencias significativas (Tabla 5).
Tabla 5.Rendimiento de materia verde (kg/ha), materia seca (kg/ha) y relación hoja/tallo para los diferentes tratamientos.
A modo de conclusión sobre los datos arrojados en este ensayo, el INTA indicó que las densidades poblacionales de pulgón azul estuvieron muy por encima de los umbrales de tratamientos recomendados. A las 24 horas de la intervención química con clorpirifós y pirimicarb se observó una notable disminución de las densidades de pulgón azul. Los tratamientos realizados con sulfoxaflor fueron efectivos a los 3 y 7 días después de la aplicación, siendo la dosis de 50 g/ha la de mayor efectividad.
Se observaron diferencias significativas en el rendimiento entre el testigo sin tratar y los diversos tratamientos, obteniendo una disminución del 51 % en el testigo respecto al tratamiento de mayor rendimiento (sulfoxaflor, 50 g/ha), lo que indica una correcta protección del cultivo de los insecticidas probados. A los 14 días después de la aplicación, se visualizó una alta densidad de pulgones infectados con hongos Entomophthorales (controladores biológicos), lo cual explicaría parte de la disminución de la población de Acyrthosiphon kondoi en el tratamiento sin control, lo cual afecta una correcta evaluación de los insecticidas. Se promueve la necesidad de futuros ensayos con los efectos colaterales sobre la fauna benéfica.