Henificación: Es imprescindible ser más eficiente La henificación es quizás uno de los sistemas de conservación más antiguos que se conocen en la ganadería, y en Argentina es sin duda el más difundido y utilizado, aunque no por ello el más eficiente. ¿Qué hacer para mejorar?.

Por el Ing. Agr. Pablo Cattani – Experto en Forrajes Conservados Las causas centrales de la falta de eficiencia en…

Por el Ing. Agr. Pablo Cattani – Experto en Forrajes Conservados

Las causas centrales de la falta de eficiencia en la henificación de la alfalfa se debe principalmente a que no se fueron ajustando las tecnologías y procesos a nivel campo, a los cambios tecnológicos que hoy demanda y ofrece el marcado pecuario.

Es por ello que bien vale la pena poder agregar algunos conceptos propios y ajenos, a los fines de ordenar los parámetros que nos ayuden a intensificar la eficiencia de producción de heno en todos sus aspectos: Productivos, nutricionales y económicos, sin importar el ambiente o zona productiva de que se trate.

Variedad
La elección de variedad de alfalfa, cobra importancia cuando se eligen variedades específicas para la confección de heno.

Haciendo mención a diversas características perseguidas por los genetistas destacaremos las mas buscadas para la producción de heno.

Plantas con tallos finos para poder tener mayor influencia de las hojas en la materia seca total aportada, bajando el nivel de fibra, incrementando digestibilidad de Materia Seca y consumo (relacionado a la FDN) y un mayor contenido proteico, por tener mayor influencia el porcentaje de hojas.

La mayor cantidad de hojas, tiene además un efecto beneficioso, en el secado del forraje, ya que especies con altas proporciones de tallos demoran más tiempo para eliminar el remanente de humedad y llegar al 20% mínimo, adecuado para la elaboración de un buen heno.

Por otra parte otra de las características buscadas es que las coronas se hallen alojadas sub superficialmente para evitar o disminuir el daño mecánico de las cortadoras o segadoras, aumentando considerablemente la muerte o pérdida de plantas y retrasando la invasión de malezas.

La siembra de pasturas puras o especies únicas favorece no solamente el momento de corte del lote y la estimación del porcentaje de humedad cuando se confeccionan los fardos o rollos, sino que además, cuando las pastura acompañante se pierde, deja un espacio libre para la invasión de malezas (lo cual aumenta el costo y el trabajo necesario) y disminuye el stand de plantas que queremos conservar en forma de heno, sabiendo que a menor volumen, mayor costo de producción de heno.

El último punto a considerar en las variedades a elegir, es que tengan una latencia invernal considerable. Esto nos ayuda concentrar producción de materia seca, lo cual diremos una vez mas que facilita los procesos mecánicos y baja los costos de producción de heno y sino que además nos ayuda a escapar de las etapas invernales las cuales además de ser pobres en producción de materia seca presentan una dificultad importante en el secado del forraje, sabiendo que la pérdida de humedad del mismo por debajo de los 15º C se hace complicada y hasta casi nulo, en algunos ambientes productivos.

Momento de corte
Una de las características de las variedades modernas de alfalfa, es demorar el rebrote, hasta el momento de la floración, lo cual facilita muchísimo la elección de este momento.

Si bien antes se hablaba de la importancia de cortar las alfalfas cuando producen un buen volumen de forrajes con buena calidad, hoy sabemos que las alfalfas tienen su “sistema de reservas lleno” cuando inician su rebrote, y este sería el momento ideal para tener calidad de forraje, con una cantidad aceptable por corte, pero teniendo como certeza, que la cantidad de cortes a realizar en el año se incrementará, ya que se estará respetando la dinámica de crecimiento de la especie logrando mayor cantidad de cortes a lo largo de la temporada productiva del cultivo.

El momento de corte óptimo para la alfalfa, es cuando la misma comienza a rebrotar tratando que el rebrote, no supere los 3 cm de altura, a los fines de poder cortar a los 5 cm sin dañarlo.

Altura de Corte
Si bien hace tiempo que venimos manejando la técnica de cortar a la altura del puño, en los lotes que son destinados a la cosecha de forrajes en forma de heno, deberíamos tener en cuenta los últimos datos investigativos, que nos demuestran que en variedades de alfalfa en donde se bajó la altura de corte de 10 cm a 5 cm, en una secuencia de tres cortes, se logró mayor desarrollo de las plantas logrando un incremente en la producción de materia seca de mas de 1 ton por ha.

Dado este punto, es importante bajar la altura de corte a 5 cm, cuando se trabaja con alfalfas en estado puro, teniendo en cuenta que la nivelación del terreno y la ausencia de huellas ocasionadas, por ejemplo por pastoreo en días de lluvia, es parte del paquete estratégico que potencia y facilita la obtención de heno de calidad al menor costo posible.