En las instalaciones dependientes de la Secretaría de San Luis Logística inauguraron una nueva línea de compactación para fardos “que forma parte del crecimiento del predio en cuanto a infraestructura, con más galpones y depósitos”, sostuvo el titular de la repartición estatal, Sebastián Lavandeira. El funcionario explicó que la expansión “se debe a que la producción de alfalfa se ha duplicado”.
En la provincia de San Luis, la siembra y cosecha de alfalfa han alcanzado su punto más alto debido a una crisis natural, que tiene como epicentro a la Cuenca del Morro, amplia zona rural anegada por las napas subterráneas. Una de las acciones adoptadas para mitigar la emergencia fue la forestación, en la cual este forraje se convirtió en una de las opciones más utilizadas por su capacidad de absorción. “Así se dio lo que se conoce como una solución rentable, pues además de contribuir a resolver un importante inconveniente, se presentó como una oportunidad de negocio para los productores de la zona”, reflexionó Lavandeira.
Además, remarcó que “para potenciar este círculo virtuoso, cuya proyección es muy importante, están disponibles los complejos de la ZAL y la AgroZAL, que conforman una política de Estado que con mucha visión de futuro estableció el gobernador, Alberto Rodríguez Saá, en 2009 y que hoy cuenta con su planta de procesamiento de alfalfa, la cual se encuentra entre las cuatro principales de Argentina”.
Mientras que la producción regional abastece con alfalfa a destinos tan demandantes como los países árabes, la nueva línea que se puso en funcionamiento este martes “permitirá llegar a clientes del Mercosur, ya que se implementa un nuevo formato de trabajo, con fardos más pequeños, por lo que estamos incluyendo a un nuevo mercado”, sostuvo el secretario de San Luis Logística.
Como corolario, Lavandeira se refirió al final de una gestión de Gobierno, reconociéndose “honrado y feliz por haber participado en un capítulo muy importante en lo que respecta a la producción de la provincia, y muy orgulloso y agradecido de las mujeres y hombres que forman este gran equipo de trabajo que suelo comparar como el de una Fórmula 1, ya que al auto no solo hay que manejarlo, sino mantenerlo para que siempre esté óptimo. Por ello, lo que dejaremos será un vehículo con nafta y listo para continuar la carrera, como debe ser”.
Fuente: Agencia San Luis
